VIAJAR A URUGUAY CUESTA LO MISMO QUE IR A EUROPA

Sin competencia, Buquebus aprovechó y multiplicó casi por 5 el valor del pasaje. En Uruguay, al peso argentino lo toman como si el dólar cotizara a $295.

Prohibido no, prohibitivo seguro. Las restricciones para ir a Uruguay durante la pandemia elevaron el costo sideralmente para poder cruzar al país vecino. Cumplir con todos los requisitos para llegar a Montevideo puede llegar a los 900 dólares por persona, el equivalente a un viaje a Europa.
Unos 120 mil uruguayos viven en Argentina y otros 30 mil argentinos viven en Uruguay. Ellos, sus familiares y otros turistas son el núcleo duro de los que cruzaban “el charco” habitualmente hasta la llegada de la pandemia.
Los 120 mil orientales que viven en la Argentina más todos los argentinos con residencia en el Uruguay o que tengan una obligación laboral impostergable del otro lado del charco, pueden hacerlo. No está prohibido e incluso algunos argentinos pueden pedir una excepción. De hecho, en el mes de agosto Lacalle Pou autorizó que Buquebus elevara a dos frecuencias semanales la ruta que une Buenos Aires con Montevideo pero solo con la mitad de los pasajes habilitados.
No así el resto de los argentinos, no cónyuges ni acompañantes, a menos que decidan radicarse con sus pertenencias allí. “Del mismo modo que uruguayos no pueden entrar en Argentina, Uruguay tampoco permite el ingreso de argentinos que no sean residentes al Uruguay”, explican amablemente desde el consulado.
De sostenerse el DNU firmado el 15 de julio hasta fin de año, Punta del Este se quedará sin temporada. Estas restricciones aplican a todos los extranjeros.
Como la ruta a Colonia no está autorizada, Buquebus se quedó sin competencia. De esta forma, la ruta económica por barco quedó clausurada y en la que siempre fue más cara un pasaje económico ida y vuelta pasó a costar $29.000. Antes de la pandemia por menos de $6500 se conseguían pasajes. La alternativa legal es ir por tierra en vehículo propio con GPS. O en avión propio.
El mismo DNU exige que a la hora de cruzar la frontera, los pasajeros “nacionales o extranjeros” muestren una temperatura corporal inferior a 37,3 °C y un test PCR (no de anticuerpos) negativo por coronavirus realizado en las 72 horas anteriores. Este requisito suma de $3.000 a $5.500 al presupuesto del que deba viajar, pero no para los que lo hagan por Buquebus porque los $29.000 incluyen el costo del hisopado. Y también pide cobertura médica: el seguro más económico sin copago de una de las aseguradoras de viajes más famosa es de $23.300. El más barato ronda los $11.500 más un copago de 100 dólares por uso.
Una vez en Uruguay, el viajero deberá aislarse 7 días en un hotel o residencia no compartida y pasados esos 7 días podría hacerse un nuevo test PCR o bien esperar a completar los 14 días antes de poder circular. Una semana de hotel sin comidas para una persona ronda los 180 dólares y el test unos 130 dólares más (o 5.500 pesos uruguayos). Además, exige el uso de mascarilla, mantener 2 metros de distancia de otras personas, usar alcohol en gel, descargar la app de seguimiento y no usar el transporte público hasta el lugar de aislamiento preventivo.
Las conversiones de pesos uruguayos a argentinos y viceversa directamente son imposibles. De acuerdo a la pizarra de este jueves del Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) el peso argentino lo toman a cambio de 15 centavos de peso uruguayo, es decir como si el dólar en la Argentina valiera nada menos que $292,33, más que el doble que el dólar blue y casi el triple que el contado con liquidación. En cambio, si uno quisiera comprar pesos argentinos con uruguayos, el tipo de cambio se eleva a 61 centavos, como si el dólar para la venta en Argentina estuviera $52,95.
La saña con el peso argentino de parte de la banca oficial no es nueva, incluso antes del cepo -por indicación del BROU- los peajes que se cobraban en pesos argentinos tenían una penalidad adicional al spread entre punta compradora y vendedora.
“No quieren los pesos argentinos, eso es claro”, fue la explicación que dieron distintos actores del mercado de cambio a este medio y coincidieron en que de todos modos no es un precio de mercado, que la cotización “está distorsionada”, aseguraron.
Así, tomando como referencia el dólar solidario, ir a Uruguay en barco por un tema puntual y volver, no baja de los 900 dólares. Si se usa el tipo de cambio oficial más y si se toma el blue será algo menos. Al regreso, también se deberá guardar el aislamiento obligatorio por dos semanas. Para quien viva solo, podrá hacerlo en su casa. De lo contrario, en el lugar que las autoridades dispongan. Por lo pronto la Ciudad no está cobrando a los que se repatrien el costo de aislarse.