DURANTE EL AISLAMIENTO HAY UN FEMICIDIO CADA 24 HORAS
Entre el 20 de marzo, cuando comenzĂł el aislamiento obligatorio por la pandemia de coronavirus, y el 10 de mayo, que fue la Ășltima vez que se prorrogĂł la medida, hubo 49 femicidios
El decreto del aislamiento social, preventivo y obligatorio no atenuĂł los casos de femicidios en la Argentina, sino todo lo contrario, ya que una mujer es asesinada por dĂa desde que comenzĂł la cuarentena. El dato fue dado a conocer gracias a un relevamiento llevado a cabo por el observatorio âAhora que si nos venâ, el cual precisĂł que, entre el 20 de marzo -dĂa en el que comenzĂł el aislamiento- y el 10 de mayo -la Ășltima vez que se prorrogĂł la medida-, hubo 49 femicidios, dejando asĂ un promedio de una mujer muerta en manos de un femicida cada 24,9 horas.
De acuerdo al informe, el 53% de los casos se dieron en Buenos Aires, donde fueron asesinadas 26 mujeres; bastante mĂĄs arriba que en Misiones y TucumĂĄn, donde se registraron 5 femicidios en cada provincia. De esta manera, las continĂșan Santa FĂ©, con 3 casos; Entre RĂos, con 2; y CĂłrdoba, Chaco, RĂo Negro, San Luis, Santiago del Estero, Santa Cruz, Salta y Mendoza, todos con uno.
âEl aislamiento puso las cartas sobre la mesa y ahora todos estĂĄn viendo esto de cerca. Nosotros venimos diciendo, desde que comenzamos a registrar (en 2015) estos casos, que el lugar mĂĄs peligroso para las mujeres es el propio hogar porque allĂ es donde mĂĄs femicidios se cometenâ, indicó Laura âLalaâ Rothberg, integrante del observatorio.
Y continuĂł: âEste contexto de cuarentena viene a reforzar esto y lo muestra muy crudamente, del cĂłmo las mujeres sufren violencia en sus casas. Socialmente estamos viendo esto de cerca, pero quienes venimos registrando esta problemĂĄtica nos damos cuenta que son nĂșmeros que dejan en descubierto esta realidad y la ineficiencia de la Justiciaâ.
Asimismo, el estudio dejĂł en claro un dato alarmante que desde el observatorio insistieron en recalcar: el agresor estĂĄ, la mayorĂa de las veces, puertas adentro de casa. Es que el 78% de los asesinatos tuvieron lugar en la vivienda de la vĂctima, el 8% en la vĂa pĂșblica; el 6% en una vivienda familiar; y el 2% en la vivienda del agresor.
âNosotras vimos que, de las 49 mujeres asesinadas en la cuarentena, 12 de ellas tenĂan medidas restrictivas como una perimetral o una denuncia hecha. Entendemos que la Justicia llegĂł tarde, porque esas mujeres pudieron llegar hasta la Justicia y, sin embargo, fueron asesinadas. Por este motivo, creemos que debe haber un desafĂo que consista en ver cĂłmo la Justicia puede tener un mayor control de las medidas que adopta, ya que vemos siempre que se violan esas medidas por parte de los femicidasâ, explicĂł Rothberg.
Bajo esta lĂnea, aseverĂł que, en medio del aislamiento, el â53% de los femicidas fueron la pareja de la vĂctima y el 15% la ex pareja, es decir, un 68% de vĂnculos cercanos con las mujeres asesinadas. Es una cifra altĂsima y por eso siempre ponemos el foco en esta cuestiĂłn de que los femicidios y la violencia de gĂ©nero ocurren en las casas y con los vĂnculos mĂĄs cercanosâ, explayĂł.
Por otro lado, sobre los otorgamientos de prisiones domiciliarias a cientos de presos producto de la pandemia del Covid-19 que azota a la Argentina, la integrante del observatorio afirmĂł: âNosotras pensamos como los familiares de las vĂctimas, creemos que no tiene que haber prisiĂłn domiciliaria para ningĂșn preso por delitos sexuales o por violencia de gĂ©neroâ.
De esta manera, informĂł que, en cuanto a los delitos sexuales, âhay un porcentaje de reincidencia muy grande y muchos de los abusos son intrafamiliaresâ, por lo que reflexionĂł: âÂżDĂłnde cumplirĂa la prisiĂłn domiciliaria ese abusador? ÂżCerca de sus vĂctimas?â.
âEntendemos que existen los derechos humanos y la problemĂĄtica de la sanidad, ningĂșn derecho va por encima de otro, pero en casos de delitos sexuales o que tengan que ver con homicidios agravados por el vĂnculo o femicidios no pueden ser contemplados de la misma manera que delitos menores, porque sĂ, corren peligro las vĂctimas, y porque serĂa una burla hacia ellasâ, agregĂł.
Finalmente, Rothberg concluyĂł: âEs un juez el que firma la liberaciĂłn y en ese caso no estĂĄ teniendo en cuenta quĂ© le pasa a las vĂctimas y a sus familias”.