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MATÓ A SU EXPAREJA Y LO DETUVIERON DESPUÉS DE DOS MESES

El hecho ocurrió el 15 de noviembre en la localidad de Pigüé, provincia de Buenos Aires, pero el sospechoso estuvo prófugo por dos meses en Almirante Brown.

Luego de que pasaran dos meses del femicidio de Clara Elizabeth Romero Candia (32), detuvieron a su expareja, identificado como el asesino que la apuñaló en noviembre del 2023 en la localidad bonaerense de Pigüé.

El presunto autor del femicidio, Leandro Sebastián Torres (37), fue detenido este sábado luego de que los investigadores descubrieran que se encontraba oculto en un departamento en el partido bonaerense de Almirante Brown.

De acuerdo con lo informado por Télam, los oficiales allanaron el departamento después de diversas tareas de investigación que generaron las sospechas alrededor de dicha locación. El análisis fue llevado a cabo por la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) Temática de Homicidios de Bahía Blanca, a cargo del fiscal Jorge Viego, quien seguía la causa desde que se originó el crimen.

Luego de ser detenido, Torres quedó a disposición del Juzgado de Garantías 4 del Departamento Judicial de Bahía Blanca y del fiscal Viego.

El asesinato ocurrió el 15 de noviembre por la tarde en la localidad bonaerense de Pigüé. La investigación comenzó cuando los familiares de la víctima, de nacionalidad paraguaya, se acercaron a la Comisaría de la Mujer y de la Familia, luego de no tener novedades de ella desde hace 4 días, algo que no era habitual y les llamó la atención.

Desde el primer momento habían barajado la posibilidad de que podría haberse encontrado con su expareja.

“Debido a ello, los efectivos se dirigieron a un departamento de alquiler ubicado en la calle Alem al 300 de Pigüé, lugar que se determinó que había sido alquilado por el hombre”, informó una fuente del caso.

“Tras contactarse con la dueña del lugar los efectivos ingresaron al departamento donde en una habitación hallaron el cuerpo sin vida de una mujer”, informó Télam.

El cuerpo, que posteriormente fue identificado como el de Candia, tenía a simple vista una puñalada en la región dorsal, mientras que había manchas de sangre en el piso y hasta en las prendas de vestir.

“En el marco de las primeras actuaciones y tras diversos testimonios se trataba de dar con el paradero de la expareja de la mujer, quien al parecer había estado con ella”, informó uno de los investigadores sobre el hombre, que según detalló el medio local La Brújula, tenía una orden de prohibición de acercamiento por la “relación tóxica” que mantenían en aquel entonces.

Se había dado a conocer, como información relevante, que la última vez que se les vio juntos fue el domingo y se sabía, con total conocimiento y pruebas, que ambos ingresaron al lugar donde se cometió el crimen.

De esta forma, el hecho continuó siendo investigado por el fiscal de Bahía Blanca, Viego, quien al tomar desde el primer momento el caso caratulado como “homicidio”, no se detuvo hasta dar con el paradero del criminal.

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