COTAPA YA COMPITE CON LAS GRANDES LÁCTEAS
El 19 de diciembre volvió a abrir sus puertas el local de ventas de productos de la Cooperativa Tambera Paraná Limitada (Cotapa), ahora en manos de los trabajadores, en Avenida Almafuerte al 1200: no es un dato menor. Después de un complejo proceso de quiebra, los empleados de la planta láctea tomaron las riendas del negocio y, de a poco, vuelven a posicionar la marca y conquistar góndolas.
Venden leche larga vida, venden dulce de leche, leche en polvo, leche fluida, y los clásicos yogures de frutas, en un envase que no es corriente, de 360 gramos. Pero como el local está tercerizado, hay otros productos en venta que no produce Cotapa. De todos modos, Carlos Strada, presidente de Cotapa, dice que los precios son competitivos y disputan el mercado con La Serenísima, que en leche fluida comercializa el sachet de litro cerca de los $800. Cotapa lo vende a poco más de $400.
«Nos llena de orgullo que hayamos podido reabrir el loca, después de mucho tiempo de haber estado cerrado. Cuando arrancamos como cooperativa de trabajo, teníamos únicamente dos productos. Pero para abrir el local, tuvimos que agregar más productos y gracias al trabajo de los asociados, y a las inversiones, agregamos productos y pudimos abrir el local y llenar las góndolas», dice Strada.
En marzo de 2022, luego de que le cortaran la luz y cerrara sus puertas del peor modo, los empleados de Cotapa consiguieron un acuerdo con sus antiguos dueños que les permitiera utilizar las instalaciones de la fábrica, ubicada en Avenida Almafuerte, e iniciar un lento proceso de producción: primero trabajaron para terceros, pero después, reinvirtieron, pusieron a punto las máquinas, incorporaron tecnología, contrataron un ingeniero en alimentos y empezaron a producir leche larga vida y leche en polvo en envases de 800 gramos.
En noviembre de 2012, la Justicia dictó la quiebra de la Cooperativa Tambera Paraná (Cotapa) Limitada, y además decretó la inhibición general de bienes y prohibió la salida del país a los miembros de la sociedad quebrada, entre ellos Juan Carlos Acevedo Díaz.
Cotapa, que estaba en concurso preventivo, ingresó en una etapa crítica que derivó en el estado de cesación de pagos. En una resolución que firmó el 24 de octubre de 2022 el titular del Juzgado Civil y Comercial Nº 9, Ángel Moia, se destaca que «el estado de cesación de pagos se exterioriza por múltiples y variados signos, directos e indirectos, los que de modo enunciativo enumera el artículo 79 de la Ley de Concursos y Quiebras, careciendo todos ellos, individualmente considerados, de valor absoluto, pues se trata de meros indicios legales».
«Nosotros -recuerda Strada- empezamos en mayo de 2022 en un acuerdo con lo que era Cotapa SA, que nos permitía trabajar para generar nuestros ingresos. En ese lapso, armamos la cooperativa de trabajo, hasta que nos dieron la matrícula». Hubo que armar y rearmar todo, equiparse, aprender a ser jefes de ellos mismos, ordenar el proceso clave en una planta láctea (frío, calor, aire). «Nos acomodamos y recién ahora hemos podido solucionar el banco de frío y hacer productos frescos, como los yogures. Estamos por largar flan y dulce de leche. Con lo primero que trabajamos fue con leche larga vida y leche en polvo», describe.
Actualmente, la Cooperativa cuenta con 44 asociados, y han hecho un acuerdo con la Cooperativa Potencia, que aportó otros 7 trabajadores. En algunos casos, son jóvenes que es su primer empleo.
Aunque resta contar con un sistema de comercialización que les permita conocer cuáles son los puntos de venta al público, Strada dice que Cotapa compite «con productos muy buenos y a un precio accesible. En realidad, es a lo que apuntamos: el mejor producto al menor precio posible. Si nos comparamos con La Serenísima, estamos a mitad de precio».
