SAUCE DE LUNA DECIDIÓ LEVANTAR EL CONTROL DE INGRESO
La cuarentena fue pensada, desde el primer momento, como una herramienta para ganar tiempo para poder equipar el sector salud y preparar a la sociedad para enfrentar el desafío que nos impone el SARS-2, Covid 19.
Frente a lo nuevo, a lo desconocido, los municipios optamos en su momento por restringir los accesos, controlar el ingreso/egreso de personas, como forma de aportar a un problema que es de SALUD PUBLICA y donde los municipios no tenemos ninguna competencia, solo vocación de colaborar.
El miedo a un virus desconocido, extremadamente contagioso, hizo que la sociedad se allanara a los controles, más allá de la poca o nula efectividad que tiene esto porque el virus no va en el asiento del acompañante sino que lo trasladamos en nuestros cuerpos, la inmensa mayoría (un 70%) sin ninguna sintomatología, y la única forma de determinar si lo tenemos es mediante un análisis de PCR que solo lo pueden realizar los efectores de salud, no los municipios, y siempre y cuando que se presenten síntomas concurrentes.
Una vez que se empezaron a conocer que las únicas medidas útiles es el distanciamiento social, el uso correcto de tapabocas, el lavado frecuente de manos y el uso de alcohol en gel, apareció una nueva normalidad a la que debemos adaptarnos como sociedad porque lamentablemente no se sabe cuándo va a estar la vacuna disponible ni cuándo va a aparecer un medicamento que cure la enfermedad.
Allí apareció una nueva conflictividad entre los controles y la libertad de circulación que consagra nuestra constitución nacional. Por eso nos intimaron a abrir los accesos por ruta K y entonces dejó de tener sentido un control figurativo en el acceso si las personas se podían trasladar libremente por las rutas provinciales y nadie se los podía impedir.
Sumado a eso vecinos que prestan servicios esenciales en otras ciudades de la provincia, los que estaban autorizados a circular por los distintos DNU y después una cantidad cada vez mayor de excepciones, que hicieron que careciera de sentido seguir apostados en el arco.
Frente a esto el Presidente Municipal decidió un cambio de estrategia, disponiendo el levantamiento del control del acceso, pero enfocando a partir de ahora todas las energías a fortalecer la responsabilidad individual, a consolidar hábitos de cuidado personal y sobre todas las cosas el trabajo para ir hacia la “nueva normalidad” donde los saucelunenses seamos capaces de vivir una libertad socialmente responsable y solidaria con el otro.