POLÍTICA

“LA BATALLA ES CONTRA LOS CODICIOSOS”

El presidente Alberto Fernández llamará a una mesa de acuerdo contra la inflación a todos los sectores, pero no dudará en “atacar” a codiciosos y especuladores

El presidente Alberto Fernández aseguró en la noche del viernes que la batalla del Gobierno es contra los especuladores y los codiciosos y anunció que dialogará con cada gobernador y gobernadora y con todos los intendentes para que las medidas a adoptar lleguen a cada rincón de la Argentina.

“Necesitamos luchadores contra la especulación y la inflación en cada comercio, en cada mesa, en cada casa. Esta batalla necesita de cada uno de nosotros y nosotras”, remarcó el jefe de Estado.

Previamente, el presidente calificó de “histórico” que el Congreso haya aprobado por ley una refinanciación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y ponderó que esa norma se haya sancionado con “el consenso de legisladores de distintas fuerzas políticas”.

Fernández aseguró que “estamos en un momento bisagra de la historia argentina y mundial. Se suman nuevas tensiones a viejos desafíos que no se pudieron o supieron “encarar”, y remarcó que la inflación es un “fenómeno histórico en la Argentina, casi una maldición con la que muchos crecieron, un callejón recurrente del que pareciera ser imposible salir”.

También sostuvo que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) “permite comenzar a ordenar las variables macroeconómicas centrales en la lucha contra la inflación”, a la que volvió a considerar como un “un fenómeno multicausal”.

Además explicó la suba de los precios internos del trigo a partir del incremento de los valores internacionales, producto de guerra entre Rusia y Ucrania y aseguró que “no hacer nada tendría consecuencias”.

Decidió “constituir un fondo de estabilización con el objetivo de evitar el traslado de esta suba del precio internacional (del trigo) al precio que pagan los argentinos y argentinas”, y aseguró la vocación del Gobierno de construir “acuerdos con los diferentes sectores” pero sin dudar en “aplicar todas las herramientas del estado para fijar y hacer cumplir las medidas necesarias”.

También convocó a representantes de los sectores productivos, empresarios, trabajadores formales y de la economía popular, representantes del campo y el comercio, la pequeña y mediana empresa y la sociedad civil a “una mesa de acuerdo que permita diseñar un mañana en la lucha contra la inflación”.El presidente afirmó que “sería absurdo cargar en la guerra la culpa de nuestra inflación. Pero la verdad es que está incidiendo negativamente y causando mayores problemas. Tengo el deber de advertirles que este contexto internacional complica aún más las cosas”.

Sostuvo que la batalla del Gobierno nacional “es contra los especuladores y los codiciosos” y anunció que dialogará “con cada gobernador y gobernadora y con todos los intendentes para que las medidas que adoptemos lleguen a cada rincón de la Argentina”.

El mandatario afirmó que se está en “una situación extraordinaria que requiere soluciones extraordinarias” y advirtió que su gobierno no va a dejar de controlar y fiscalizar precios y aplicará la ley de abastecimiento si es necesario. “Se utilizarán todos los instrumentos con los que cuenta el estado para cumplir con el objetivo de controlar los precios”.

Consideró que el país “necesita fortalecer expectativas”, y pidió a los argentinos “sentarse a un misma mesa” con el propósito de alcanzar “los entendimientos necesarios para construir el futuro”.

“Vamos a defender y proteger la mesa de las familias argentinas. Lo vamos a hacer juntos, unidos, entre todos y todas. Confiando en nuestra fuerza y nuestra perseverancia. Sabemos el rumbo, estamos en el camino”, subrayó.

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