“NECESITAMOS QUE EL CONGRESO ESCUCHE LOS RECLAMOS DE LAS FAMILIAS”
El diputado nacional Gustavo Hein hizo referencia a la falta de interés por parte de la legislatura para tratar estos reclamos, “deberían ser una prioridad para la dirigencia política nacional” afirma el legislador.
“Se convirtió en un martirio”, afirma Gustavo Hein, al mismo tiempo que marca, “hemos presentado numerosos proyectos para dar una respuesta a estas familias pero no nos han dado importancia. El Estado promueve un sistema usurero que en una economía inflacionaria, castiga a los trabajadores y da un mensaje preocupante: ser propietario de una vivienda es cosa de otras épocas”.
En nuestro país, más de 100.000 familias se ven afectadas por esta situación, el 90% de los contratos fueron establecidos entre los ciudadanos y bancos públicos, pero desde el gobierno afirman que no pueden dar respuesta a esta demanda.
La situación deja a aquellos que, por ejemplo, solicitaron un monto de $2.600.000 en el 2018, a deber hoy $9.600.000, es decir, más del triple, algo que no se condice con el salario real que reciben los trabajadores y que la inflación ha perjudicado seriamente.
“Hemos propuesto un sistema para proteger a estos tomadores de deuda para resignificarlos y considerarlos lo que son. Familias argentinas con un sueño noble que confiaron en el Estado y fueron defraudados” afirmó el legislador, quien denunció además “poca predisposición” por parte de la Cámara para abordar el asunto, “no han rechazado nuestra propuesta porque lo han cajoneado, ni siquiera lo han decidido tratar en Comisión” recalcó.
“El proyecto propone suspender hasta julio del próximo año las ejecuciones hipotecarias de los créditos. Al mismo tiempo congelar las cuotas y darles la posibilidad a los tomadores de deuda, de poder transformar lo adeudado en un nuevo crédito con condiciones más convenientes.”
“Por último establecer un límite del 30% de los ingresos de la familia para el pago de estas deudas, sin excepciones. Para que la lógica del crédito esté vinculada con los salarios y no con la inflación, ya que esto constituye un sistema de usura inmoral ejercido en perjuicio de la ciudadanía en un país que no puede controlar dicho índice. Esperemos decidan tomar este tema porque la situación es, para muchas familias, verdaderamente desesperante”.