DOS SALARIOS MÍNIMOS NO ALCANZAN PARA QUE UNA FAMILIA NO SEA POBRE
La canasta básica aumentó 2,1 por ciento en noviembre y roza los $74.000 y se acerca a la mediana de los salarios del sector registrado, registró AIM.
La canasta básica alimentaria (CBA), integrada por los productos mínimos que necesita una familia para comer y no caer bajo la línea de indigencia, aumentó 2,6 por ciento en noviembre y se ubicó en $31.700. Por otra parte, la suba de la canasta básica total (CBT), que introduce otros bienes y servicios y traza la línea de la pobreza, fue de 2,1 por ciento y dejó el estándar muy cerca de los $73.900.
El salario mínimo vital y móvil es de $32.000, apenas el 43 por ciento del valor de la canasta de pobreza. Así, no solo un salario mínimo no alcanza para mantener a salvo de la pobreza a una familia sino que no alcanzan dos salarios mínimos, registró AIM.
Una familia tipo integrada por dos adultos y dos menores debió contar en noviembre con $31.724 para no caer en la indigencia. Esto es $799 más que octubre y $10.151 más que un mes atrás. En el caso de la canasta de pobreza, llegó a un valor de $73.918 para una familia de dos mayores y dos menores; $1.552 más que en octubre y $22.142 más que un año atrás.
En lo que va del año, la CBA acumuló 34,1 por ciento, mientras la de la CBT resultó en 31,3 por ciento, según informó una publicación del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) al que accedió AIM.
Si bien el precio de los alimentos fue moderado por los programas de congelamiento, igualmente se evidenciaron algunos saltos en rubros específicos como la carne (el asado escaló 12,7 por ciento en noviembre y la carne picada común, 11,4 por ciento) y generó que la canasta básica alimentaria aumentara su valor por encima de la inflación general del mes, que fue de 2,5 por ciento según informó ayer el Indec.
En los últimos 12 meses la canasta básica alimentaria se encareció 47,1 por ciento, casi cinco puntos porcentuales por encima de la canasta básica total, que aumentó 42,8 por ciento. En ambos casos, la suba estuvo por debajo del promedio general de la inflación, que para el mismo período fue de 51,2 por ciento.