ALERTA POR 2.800 ROBOS CADA DÍA A DOCENTES Y ESTUDIANTES
Un estudio sostiene que el promedio diario durante el año pasado fue de 2.000 hechos de inseguridad en los alrededores de escuelas, por lo que la cifra subió un 40%. También se registran tres homicidios.
Una profesora se defendió, en el piso y a las patadas, del ataque de una banda de motochorros que intentó robarle sus pertenencias cuando se dirigía a dar clases en una escuela de Isidro Casanova. El violento episodio ocurrió el pasado miércoles y no se trata de un hecho aislado, ya que durante 2023 hay un promedio diario de 2.800 robos a estudiantes, padres y docentes en cercanías de las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
El dato surge de un nuevo Informe sobre Delitos, Inseguridad y Violencia, desarrollado por la ONG Defendamos Buenos Aires con la asistencia del Estudio Miglino y Abogados y que toma como punto de partida los hechos que lleva adelante la justicia Nacional de Instrucción, más los casos de la justicia en lo Penal de Lomas de Zamora, Moreno, San Martín, Quilmes, La Matanza, Morón y San Isidro.
Allí quedó acreditado que “los robos y delitos contra niños y niñas y adolescentes que van a la escuela, docentes y padres; no paran de crecer”, precisando que “en 2022 teníamos un promedio de 2.000 casos diarios y en la actualidad llegamos a los 2.800 con un 40 por ciento de agravamiento en la situación. En el 2023, además hubo tres homicidios. Que incluye el terrible caso de Morena Domínguez, la nena de 11 años asesinada en Lanús, más dos adolescentes asesinados para robarles el teléfono celular al momento de salir de la escuela, en Quilmes y en Morón”.
“Las ‘zonas rojas’ del robo a chicos y chicas que van a la escuela y a docentes en la Ciudad de Buenos Aires son tres; zona 1: Belgrano y Núñez, zona 2: Palermo. Zona 3: Recoleta y Barrio Norte. En la zona 1 hay más de 30 colegios, públicos y privados. Desde el Oxford High School a la escuela ORT de la colectividad judía. Esa situación la conocen los delincuentes que evitan robar a los chicos en la puerta del colegio porque padres, docentes y personal de seguridad pueden detenerlos, pero sí lo hacen y en bandas mixtas; en general conformadas por dos hombres y una mujer, a pocas cuadras de los establecimientos, cuando los chicos están llegando temprano por la mañana o cuando se retiran al mediodía o por la tarde. Mochilas, teléfonos celulares y el poco dinero que llevan los estudiantes son el magro botín que buscan los ladrones; sin reparar en el terrible daño psicológico y físico que hacen a los chicos que roban. La zona dos es Flores en inmediaciones de la villa 1-11-14 y la zona 3 en Recoleta, frente a la narcovilla 31. En todos los casos, la impunidad de los delincuentes es casi total”, dijo Javier Miglino, abogado experto en Seguridad y Director de Defendamos Buenos Aires.
Provincia de Buenos Aires. “Lo más peligroso para los estudiantes en Provincia de Buenos Aires es el viaje de ida y de vuelta. Tanto caminando, en bicicleta como en colectivo. Les roban cuando van a la escuela y cuando regresan. A veces incluso, los lastiman, los hieren de gravedad o los matan para robarles el celular en el interminable bucle de los ‘celulares manchados con sangre’, que las mafias roban y venden a los reducidores que terminarán con seguridad, siendo vendidos en cuevas”, dijo Miglino.