SU GATO MURIÓ, LO CREMARON Y AL MES VOLVIÓ A LA CASA SANO Y SALVO
El felino había desaparecido el 19 de mayo en la localidad inglesa de Warrington. A los dos días, sus dueños salieron a buscarlo y lo hallaron decapitado al costado de una autopista. Pero, una semanas más tarde, se produjo “el milagro”. ¿Qué pasó?
Para muchos las señales enviadas del “más allá” siempre son respetadas, y aunque no tienen explicación alguna, suelen sorprender a propios y extraños aún si la protagonzan animales.
Lo cierto, es que una familia de la ciudad inglesa de Warrington se conmocionó por la muerte de su gato y hasta lo cremaron, pero un mes después el animal apareció vivo en su casa.
Todo comenzó el 19 de mayo, cuando Rachel Fitzsimons y su familia se preocuparon porque su mascota Frankie (14 años) se había escapado de su vivienda.
Al día siguiente, como no regresó, comenzaron una intensa búsqueda por Warrington, su ciudad. “Lo buscamos por todas partes y había mucha gente involucrada. El tiempo estaba horrible, así que sabíamos que Frankie volvería a nuestro hogar si pudiera”, relató Fitzsimons al portal Insider.com.
Dos días más tarde, la mujer y su marido se encontraban con su vehículo recorriendo una autopista cercana cuando a un costado vieron el cuerpo de un felino: estaba decapitado. “Se parecía a Frankie. Mi esposo se bajó, caminó por la banquina y se acercó todo lo que pudo, pero no pudo corroborar”, contó al mismo medio.
El matrimonio condujo de vuelta a su casa y llamó a los operarios de la autopista para que los asistieran: “Fueron muy serviciales y salieron varias veces a chequear el cadáver. Les di una descripción de Frankie: un gato atigrado mullido con la barriga blanca. El felino muerto coincidía con eso”, dijo Fitzsimons al diario Manchester Evening News.
Una vez que recibieron la confirmación, los ingleses fueron a buscar el cuerpo. “Vivimos muy cerca de la autopista, así que parecía probable que fuera nuestro gato. No miramos el cuerpo porque era demasiado angustioso”, relató al periódico.
Más tarde, cremaron los restos del animal y pusieron la urna en su propiedad. “Remy (hijo de la pareja de 7 años) solía dormir con Frankie en su cama todas las noches, así que se angustió cuando desapareció. Lloró. Cuando recibimos las cenizas, Remy las puso junto a su cama. Después estuvimos todos llorando durante días”, reveló.
Sin embrargo, transcurridos 22 días de la “muerte” del felino, se produjo algo inesperado. “Mi marido oyó un maullido fuera y luego yo lo oí gritar. Salimos corriendo y allí estaba Frankie. Remy lloraba y preguntaba: ‘¿Es real?’ Fue un momento increíble”, recordó Fitzsimons. La familia había cremado otro cadáver de gato, creyendo que se trataba de su mascota.
“Estaba desaliñado y muy delgado, pero lo hemos revisado en el veterinario y está bien. No tenemos ni idea de dónde estuvo, pero nos sentimos muy afortunados de tenerlo de vuelta. Es cierto lo que dicen de las nueve vidas, pero a Frankie no le quedan muchas a este ritmo”, expresó bromeando.