CIERRAN CURSOS Y DEJAN SIN ESTUDIO A ALUMNOS Y SIN TRABAJO A DOCENTES
El grupo de docentes de la Escuela Secundaria N° 31 “Benito Juárez” de Estación Yuquerí, Departamento Concordia, denunciaron ante este medio una serie de medidas que recientemente ha tomado la Dirección de Educación Secundaria y que evidentemente, van en detrimento de la educación pública, en perjuicio de los estudiantes y en perjuicio de la institución en su conjunto.
En ese sentido detallaron “en el día de ayer nos han informado que no han habilitado los cursos 3° y 4°, divisiones B. Los argumentos son poco satisfactorios: Nos dicen que la matrícula existente de alumnos no justifica que estos cursos sigan abiertos, lo que deja en evidencia, claramente, la necesidad o capricho de las autoridades de reducir el gasto público”.
“No de acuerdo con esta medida respondemos que no hay espacio en la institución para un curso de 30 alumnos (ese número surgiría de juntar ambas divisiones del tercer año) y de haberlo, es impensable que un grupo de 30 alumnos pueda desarrollar sus clases sin problemas. Al contrario, es antipedagógico, es hacinamiento, es incomodidad, es insalubre para los docentes y para los propios alumnos.
Por otra parte, el cuarto año b, no solo traspasa la cantidad de estudiantes y es numerosa sino que además, forma parte de una orientación en Arte, muy distinta a la orientación en Ciencias Naturales de la división A. Esto implica que muchos estudiantes que se sentían incluidos en el sistema educativo y que veían un espacio hacia dónde dirigir sus capacidades y habilidades, hoy tengan que pasar a un grupo y a un canon de materias para las cuales no se hayan preparados. Muchos de ellos han elegido a nuestra escuela pensando en su orientación y hoy se encuentran defraudados por el sistema educativo que elige por ellos. Véase si se quiere: derecho a la igualdad de oportunidades, calidad educativa, derecho a continuar las trayectorias escolares.
Partamos de que el Consejo General de Educación ha aprovechado de esta situación angustiante como es la pandemia y sus consecuencias, para tomar estas decisiones que nos afectan a todos. Se ha aprovechado de que los canales de comunicación y reclamo están acotados, para achicar nuestro espacio institucional que tanto esfuerzo nos ha costado. Vale aclarar que ya son más de seis (6) años que la escuela cuenta con estas divisiones B y de un día para otro, deciden cerrarlas, dejando sin trabajo, justo en una situación de crisis, a muchos docentes comprometidos con la educación de nuestros jóvenes.
Pero no es nuevo que nuestra escuela se enfrente permanentemente a la desvalorización. La institución también carece de un transporte que lleve a los estudiantes, por lo menos desde Villa Adela o desde alguna zona más céntrica hacia Yuquerí. Los estudiantes deben pagar línea pública de colectivo correspondiente a la empresa Chamussy. Eso resulta ser un presupuesto para las familias y ni pensar si son más de uno. La Beca para el transporte Rural cubre a los estudiantes que viajan por la ruta 22 desde los Barrios Coelho y El blanqueado (Desde la escuela hacia el oeste). Los estudiantes de Villa Adela pagan pasaje. Es sorprendente que en estos años, nadie se haya acordado de la situación de nuestros estudiantes y docentes y aún hoy no se cuente con transporte para la escuela. Quizás esta última solución sería incongruente con los intereses del transporte de línea Chamussy pero hay que entender que se trata del acceso a la educación. No nos olvidemos que los chicos del barrio Mendieta han pedido transporte escolar y, hasta la fecha, las autoridades no han dado respuestas.
Hoy, muchos de los estudiantes que asisten a nuestra institución se han visto excluidos de otras escuelas de la ciudad por falta de banco y de una institución que los contenga. Además, han heredado un sentido de pertenencia a la institución, generado por los hermanos mayores ya egresados o a punto de hacerlo. Si hoy faltan alumnos en nuestra escuela es pura y exclusiva responsabilidad de las autoridades del Consejo General de Educación de la provincia, que están incumpliendo con el derecho de los estudiantes de acceder a la educación secundaria y a una educación de calidad. Las personas que componemos nuestra querida escuela secundaria N° 31 hemos luchado a diario para sostener este derecho elemental y brindar un espacio digno para permanencia de sus estudiantes. A cambio, recibimos una noticia que implica que la supervisión desconoce la cultura y las necesidades de la escuela.
La continuidad de los proyectos institucionales se ve afectada por estas medidas arbitrarias, como así también el crecimiento de las mismas. Nos merecemos tener la estabilidad laboral que ya hemos ganado con el sostenimiento de nuestros espacios y de todas aquellas actividades que no hicieron más que brindar lo mejor de nosotros por más de seis años” concluyeron.
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