PROVINCIALES

EL DECRETO DE MILEI “NO CAYÓ MUY BIEN” EN EL SECTOR FARMACÉUTICO

El dirigente del Colegio de Farmacéuticos de Entre Ríos, Claudio Iriberry, planteó la preocupación que genera en el sector decreto presidencial que desregula la economía y la actividad farmacéutica.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio Plaza), Iriberry afirmó que el decreto presidencial “no cayó muy bien” porque “respecto a las farmacias y a lo que tiene que ver con la profesión farmacéutica es un avasallamiento lo que han hecho”. “A esto la farmacia ya lo vivió en la década del ‘90, después se trabajó durante mucho tiempo en la provincia para tener una ley propia como la ley de farmacia y la regulación de la actividad profesional, y ahora esta desregulación viene a herir sensiblemente lo que hemos venido trabajando”, explicitó.

Sobre el modo concreto en que afecta al sector, indicó que “lo que más preocupa es la cuestión sanitaria sacando al medicamento de la farmacia considerando que el medicamento de venta libre puede venderse por fuera del ámbito de la farmacia, poniendo a un kiosco, un supermercado o un drugstore donde se pueda adquirir un medicamento al mismo nivel que una farmacia, poniendo en riesgo el control sanitario, la seguridad y calidad de un producto farmacéutico y fomentando las adulteraciones de medicamentos que conllevan los problemas de salud que ya se dieron en algún momento”.

En cuanto a los medicamentos genéricos, planteó que “lo que se menciona ahora es la obligatoriedad, que ya lo era hasta el momento, de prescripción por nombre genérico, lo que sacan en esto es la sugerencia de la marca comercial. El tema del genérico hoy está en un kiosco o en un supermercado como cualquier otro medicamento de venta libre y por lo tanto, es la preocupación que nosotros venimos trayendo y trabajando en un flagelo que nosotros siempre consideramos una cuestión sanitaria por el hecho de que no hay respaldo de un profesional farmacéutico ni una seguridad en la trazabilidad del medicamento (laboratorio, droguería, farmacia) y con esto lo vienen a poner al alcance de la gente para que lo pueda adquirir sin un debido consejo, sin respaldo de un profesional, de un facultativo que se quemó las pestañas durante 5 o 6 años en la facultad”.

Como resumen, dijo desconocer “cuál es el espíritu o el objetivo de esta determinación”.

Consultado por el aumento de los precios, comentó que “no está cerrada la primera quincena de diciembre pero los precios han venido acompañando el ritmo inflacionario de entre un 20 a un 30% en los últimos días; en la farmacia tenemos un precio ponderado que es el precio de PAMI que está por debajo del precio de venta al público”.

“Las farmacias no somos formadores de precios, cada mañana o tarde al prender la computadora te encontrás con los precios actualizados porque eso lo maneja por convenios entre la industria farmacéutica y lo que era en su momento –no sé cómo quedó ahora- el área del Ministerio de Economía que acordaba precios. Nosotros como farmacia no somos formadores de precios y el precio se fija entre la industria farmacéutica y la regulación del Estado”, concluyó.

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