LOS MOTOCHORROS COMETEN UN ASALTO CADA 21 MINUTOS

Los hechos perpetrados por los motochorros generan miedo y preocupación en la población del área metropolitana. Desde el comienzo de la cuarentena suman más de 4.100 ataques en AMBA. Los motochorros más violentos son colombianos y venezolanos que ingresaron al país gracias a un programa de refugiados creado por Mauricio Macri
Un relevamiento privado confirmó que durante la pandemia de coronavirus los ataques perpetrados por motochorros no disminuyeron y a los 4.100 asaltos que protagonizaron desde el comienzo de la cuarentena el 20 de marzo hasta fin de julio, hay que agregarle 480 robos en la primera semana de agosto en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
“Esta semana fue detenido Brayan Steven Iguaras Varela, un peligroso motochorro colombiano con antecedentes por robo aquí y en Colombia. Llegó al país en el año 2016 con el Programa de Refugiados Colombianos y Venezolanos, creado por Mauricio Macri y desde ahí solo se dedicó al crimen. Sin embargo las numerosas causas penales que tenía en su haber no le impedían estar en su casa ya que gozaba de arresto domiciliario con una tobillera electrónica. La misma tobillera con la que fue detenido en la calle Agüero al 1700 luego de romper el vidrio del acompañante de una camioneta para robarle una mochila con 10 mil dólares en Recoleta. Su cómplice, también colombiano consiguió escapar pero fue detenido al día siguiente”, dijo Javier Miglino, director de Defendamos Buenos Aires, a cargo del estudio.
La tobillera electrónica dio todos los datos. “No hizo falta demasiada investigación para conocer quién en realidad era el motochorro colombiano porque la tobillera electrónica brindó todos datos. Sin embargo el dispositivo permitió que el delincuente salga a robar tranquilamente”, dijo Miglino.
Declaraciones de la ministra de Seguridad
“Hace unos días la ministra de seguridad de la nación, Sabina Frederic, admitió que se equivocó al comparar a la Argentina con México y Brasil en inseguridad y al decir que los medios amplifican los hechos de violencia. Debió reconocer el notable incremento de la inseguridad y la violencia porque las bandas de malvivientes que atacan en moto salen a robar armados y decididos a todo, por lo que ante el menor atisbo de defensa por parte de la víctima, disparan (tal como le ocurrió a Fernando Marino, el muchacho que hacía repartos para la empresa Mercado Libre y acabó fusilado en la localidad de Adrogué por dos motochorros) o le rompen los huesos, literalmente, tal como padeció en carne propia Daiana en Glew a quien le fracturaron la tibia y el peroné para robarle un teléfono celular”, dijo Miglino.
El oeste del Conurbano muy golpeado
“Los robos en San Justo, Ramos Mejía, Laferrere y Palomar son continuos. En este último barrio fue baleado un muchacho para robarle el teléfono celular cuando iba al supermercado a hacer unas compras sobre la calle La Pampa al 1200. En ese lugar, cercano a la Villa Carlos Gardel, los vecinos nos manifiestan que no entienden la decisión del Ministerio de Seguridad de la Nación de haber quitado la custodia permanente de la Gendarmería Nacional, que llevaba tranquilidad al populoso barrio”, dijo Miglino.
Los motochorros extranjeros son letales
“La gente tiene presente el homicidio de Matthew Gibbard, el turista inglés asesinado y su hijo heridos de bala por una banda de 10 venezolanos del Cartel Tren de Aragua que llegaron al país en 2016 como parte del Programa para Refugiados que llevó a cabo el entonces presidente Mauricio Macri. O el turista sueco Christoffer Persson, atacado por motochorros extranjeros en la vereda de Tacuarí al 700, en Monserrat, cuando recibió un disparó que le causó la amputación de una pierna. En base a las denuncias puede establecerse que los motochorros argentinos roban y se fugan pero los extranjeros, en particular los colombianos y venezolanos, disparan sin motivo, matando a numerosas víctimas”, dijo Miglino.
Los barrios más castigados
Según Miglino, los barrios de la Ciudad más “atacados” por los motochorros son Belgrano, Palermo y Recoleta, con “robos de todo tipo y usurpaciones entre los delitos más cometidos”; mientras que en la provincia de Buenos Aires marchan a la cabeza Ramos Mejía, San Justo, San Martín, Lomas de Zamora y Quilmes.
Las flotas colombianas
“Aquellos que retiran dinero del banco son seguidos de cerca por las bandas de motochorros extranjeros, hacen inteligencia previa, marcan a las víctimas y luego los ladrones se dedican a perseguir a sus víctimas a bordo de motos y autos nuevos, comprados por el narcotráfico. Son las temibles ‘flotas colombianas’, que en los últimos meses han ido comprando taxis usados, y utilizan esos móviles para salir a robar. El foco en territorio porteño está en controlar vecinos que circulan en la pandemia haciendo caso omiso de estos peligrosos delincuentes”, concluyó Miglino.